El reto de identificar habilidades genuinas en el proceso de reclutamiento

Hace casi 10 años, la International Coach Federation (ICF), la asociación profesional de coaches con más miembros asociados del mundo, llegó a estimar que, en ese entonces, el total de coaches activos era de 41,300 en todo el mundo, generando con su actividad ingresos de $47,900 anuales por profesional, una cifra que nos puede dar luces del crecimiento de estos servicios.

Asimismo, actualmente, se percibe una mayor demanda de coach laborales por parte de los solicitantes a trabajos y de personas que desean recolocarse en otras áreas. Según un estudio de empleabilidad de Career Partners, 9 de cada 10 ejecutivos que cuentan con un coach fortalecen su capacidad laboral hasta en un 90% al desarrollar sus habilidades. Sin embargo, sin bien al contratar estos servicios el objetivo es asesorarse para desenvolverse mejor en las entrevistas y vender una imagen acorde a lo requerido por el puesto, podría ocurrir que no sean habilidades genuinas y que solo han sido trabajadas para el momento.

En esa línea, es crucial y recomendable para los gerentes de recursos humanos aprender a descubrir aquellas habilidades que son y no son genuinas del candidato, con la finalidad de tomar decisiones de contratación más certeras y alinear adecuadamente las capacidades del candidato con las necesidades y expectativas del puesto. Esto ayudará a garantizar un proceso de selección más efectivo y a construir equipos sólidos y productivos de trabajo.

Por esta razón, hoy en día, la labor del área de recursos humanos y selección es más importante que nunca, ya que deben estar atentos a esto al realizar un proceso de reclutamiento. Este, finalmente, puede concluir en la contratación de postulantes que están muy bien capacitados para entrevistarse, pero su comportamiento no necesariamente refleja lo que han ofrecido.

Las herramientas para identificar habilidades y capacidades genuinas en los candidatos son pruebas de personalidad, entrevistas a profundidad, entrevistas por competencias y, finalmente, cruzar referencias. Sin embargo, las personas que están realmente preparadas logran llevar a cabo con éxito las entrevistas por competencias, por lo que es la herramienta más importante durante el proceso de reclutamiento.

Por otro lado, existen pruebas psicométricas que ya han sido validadas por estudios y complementan las entrevistas a profundidad y por competencias. Estas herramientas disminuyen la posibilidad de que alguien pretenda tener una competencia que no tiene. No obstante, también entrenan a los solicitantes para dar bien estas pruebas.

Cada entrevista es distinta. Los expertos en headhunting observan y llevan la entrevista de acuerdo con cómo observan al postulante, qué contestan y cómo lo expresan. Solicitar la asesoría de una empresa experta en reclutamiento y evaluación de ejecutivos, beneficiará a las empresas a no invertir recursos en vano y principalmente tiempo en contratar a candidatos que finalmente no están preparados para el cargo.